dimecres, 24 de febrer del 2010
El hiperrealismo juerguista de Juan Francisco Casas
Hace bastante tiempo que tengo que hacer un inventario de mi bagaje cultural para enfrentarme a determinados autores, he de saber el porqué de su movimiento, su contexto social, su obra anterior. La decisión de si me gustan o no, la definitiva, siempre la suelo tomar frente a su obra, y esa viene generada por un sentimiento que es muy difícil de explicar. Otro día será el adecuado para hablar de conceptos como abstracción, cubismo o surrealismo, y de aquellos nombres que ilustrarían esas corrientes.
Hoy quiero recordar el cuadro de Antonio López, Madrid desde Vallecas, a Eduardo Naranjo por sus sueños extremeños, y a mi querido Manuel Gómez Ribero.
Hoy quiero hablar de realismo y de hiperrealismo.
Juan Francisco Casas hace aquello que la pintura lleva haciendo desde que habitamos en las cuevas, recoge el instante. Hace aquello mismo que ilustró Velázquez, el momento de un huevo frito. Extrae esas imágenes que todos hacemos con la inmediatez que nos dan las actuales cámaras de bolsillo, o de móvil, para dejarlas colgadas en la eternidad.
Y su técnica se sirve de un óleo fresco y muy luminoso, y de uno de los más humildes instrumentos de escritura, el bolígrafo bic.
No quiero decir más, os invito a ver su obra, yo he tenido ocasión este fin de semana en Madrid y me ha dejado muy sorprendido.
Etiquetes de comentaris:
Arts visuals - Exposicions - Teatre,
Cristóbal
Subscriure's a:
Comentaris del missatge (Atom)
És curiós com Juan Francisco Casas té molta difusió per internet. De fet corren molts PowerPoints amb les seves il·lustracions. Té un domini del boli Bic que és meravellós!
ResponEliminaHe vist obres del Casas, sobretot perquè internet en va plena. Jo de moment em quedo encara amb Antonio López. Crec que Casas és tan virtuós com López, però jo al segon li trobo més ànima, no sé com dir-ho.
ResponElimina